SU DESEO ES MI DELEITE

 



Nuestros deleites superficiales son muy efímeros, fáciles de complacer y llenos de corrupción, pero existe un deleite muy profundo en todo ser humano que puede ser realmente satisfecho, solo que nada ni nadie sino solo Dios puede satisfacerlo por completo.

“Me mostrarás la senda de la vida; en tu presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra para siempre.” Salmo 16: 11 (RVR 1960)

La plenitud de gozo solo es posible en el Señor, en quien murió en la cruz por nosotros sin nosotros merecerlo, pero lo hizo por amor, limpiándonos de todo pecado y corrupción para poder vivir en el sendero de la santificación, limpiando nuestros corazones con Su Palabra para adorarle en Espíritu y Verdad, gozándonos y deleitándonos en Su Deseo que es darte toda la gloria a Él, magnificando su Nombre sobre toda la tierra, porque solo Dios es Dios y solo Dios merece toda honra y gloria.

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