SEAMOS FELICES

Jajajaja esa pareciera ser la mejor introducción para quienes solo quieren reír, pero no siempre el que ríe es feliz.

Jejejeje o jijijiji no dicen tanto como la genuina alegría de quien en verdad ha pasado por momentos difíciles y aun así sigue permaneciendo con gozo en el camino del Señor.

El conocimiento no puede verse como un motivo de tristeza sino por el contrario tiene que llevar a un acto de cambio para bien y de encontrar un significado valioso en cada decisión que se emprende, pero si no se somete al amor es absurdo. La irracionalidad o el abandono al conocimiento no significa felicidad sino es el uso que se le hace, si se usa para un placer egoísta entonces se sufrirá, convirtiendo esa alegría en tristeza, a causa de este mal uso, pero si tanto el conocimiento como la vida es administrada para la honra y gloria de Dios la felicidad que se espera será tan grande que olvidará cualquier rasgo de tristeza de una vida pasada.

No nos compliquemos buscando el amor y la felicidad en quien es mortal sino miremos al que es eterno porque solo El puede darnos una felicidad que crece a través aun de los momentos difíciles, porque no esta sustentada bajo las circunstancias sino bajo el amor, ese amor que es eterno, el mismo que proviene únicamente del arrepentimiento y fe en Jesucristo.

“…Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia…” Jeremías 31: 3 (RVR 1960)