EL EVANGELIO DE DIOS
Es importante que compartamos del evangelio de
Dios de una forma impactante y pura, dejando a Jesucristo vivir su vida en
nosotros, de lo contrario solo saldrán palabras vacías de nuestra boca. Es
nuestra obligación, como hijos de Dios, prepararnos para presentar buena
defensa del evangelio.
“Sino
santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados
para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande
razón de la esperanza que hay en vosotros”
1
Pedro 3:15 (RVR 1960)
Los verdaderos cristianos no pueden estar en
comunión con tipos de enseñanzas que van en contra de lo que la Palabra nos
enseña. ¡OJO! Pues el diablo nos quiere confundir con falsas enseñanzas que
trasmite por medio de sus mensajeros: “los falsos maestros”, por ello es que
debemos prepararnos para que no llegue la confusión en nuestras vidas, y la
mejor forma de prepararnos es dejando que el Espíritu Santo nos enseñe por
medio de su Palabra.
“Pero
el Dios de la paciencia y de la consolación os dé entre vosotros un mismo
sentir según Cristo Jesús, para que unánimes, a una voz, glorifiquéis al Dios y
Padre de nuestro Señor Jesucristo.”
Romanos
15:5-6 (RVR 1960)
Es nuestra obligación unirnos como iglesia, un
mismo cuerpo, en defensa del evangelio. No podemos tolerar y permitir falsas
enseñanzas y falsas doctrinas que pervierten el poderoso evangelio de nuestro
Señor Jesucristo.
LOS FALSOS MAESTROS
En la actualidad hay gran cantidad de este
tipo de personas que entran en las iglesias y comparten una doctrina totalmente errada, negando la
obra redentora de Jesucristo. Los falsos maestros enseñan persuasivamente falsas
doctrinas y, aunque muchos no niegan directamente la obra de Jesucristo en sus
enseñanzas dan a entender que no hay sentido en la obra de Jesucristo, esto ha
llevado a confundir a muchos, aun los escogidos pueden ser confundidos sino
están bien fundamentados en la Palabra.
“Pero
hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos
maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán
al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina.”
2
Pedro 2:1 (RVR 1960)
Los falsos maestros crean mucha confusión por
sus enseñanzas, por ello la Biblia, la palabra de Dios, que es útil para
redargüir y refutar (2 Timoteo 3:16) debe ser quien nos muestre cuando la
enseñanza esta errada y también nos de claridad para poder amonestar a quien
enseña erradamente.
“Pues
Dios no es Dios de confusión, sino de paz. Como en todas las iglesias de los
santos”
1
Corintios 14:33 (RVR 1960)
La confusión en nuestros corazones es
significado de que algo anda mal, por ello es que constantemente debemos
refugiarnos en el Señor, y cuando veamos que hay confusión en nuestros
corazones no debemos dejar que esto pase así como así, sino por el contrario
debemos examinar que es lo que pasa, si es que ¿soy yo quien estoy errado o es
el otro?, y solo podremos saber esto dejando que el Espíritu Santo nos guie por
medio de su Santa Palabra. Preparémonos para poder presentar buena defensa del
evangelio. NO nos conformemos, sino por el contrario hagamos resistencia en
contra de las falsas doctrinas y enseñanzas, escuchando y obedeciendo la
verdadera Palabra de Dios. Dios pelea por nosotros, que no se nos olvide esto,
pero nosotros tenemos que clamar a Él para que nos consuele y nos haga entender
el significado real de su Palabra, a fin de seguirla y obedecerla.
“Clama
a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no
conoces.”
Jeremías
33:3 (RVR 1960)
Estamos en tiempos
finales por lo tanto tenemos aún más razones para fortalecernos en el Señor,
porque esto es como un partido de futbol, los últimos minutos son donde los
jugadores entregan sus últimas fuerzas. Así mismo, nosotros, entreguémosle
todas nuestras fuerzas a Dios, y tengamos mucho cuidado porque nuestro
adversario, el diablo, anda como león rugiente mirando a quien devorar, por lo
tanto seamos prudentes como palomas y astutos como serpientes.
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